Como no celebrar por todo lo alto el añazo que ha cumplido nuestro bebé.
Ayer tuvimos una buena merendola en casa con nuestra familia y amigos y nos lo pasamos en grande, sobre todo el pequeñajo, que lejos de amedrentarse con tanta gente y tanto jaleo, se crece en estos momentos y se lo pasa y nos lo hace pasar bomba.
Lo preparamos todo con mucha ilusión y poco tiempo, pero salió fenomenal, porque las cosas hechas con cariño siempre triunfan (como los cupcakes que preparó para nosotros mamá bombón, de los que os hablaré en el próximo post).
Os dejo las primeras imágenes de algunos de los detalles y los mejores momentos, eso sí, un poco regularcillas me temo, porque mi adorada cámara se quedó olvidada en el maletero de un coche a la vuelta de nuestro viaje durante el puente, y no la volveré a tener en mi poder hasta el próximo jueves :-(
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